Sábado de las VI Semana Ordinaria

Mc 9, 2-13

Hemos llegado a uno de los pasajes donde Cristo nos muestra más claramente a través de sus discípulos la gloria que había recibido de su Padre. Seis días después de hablar de esta gloria, Jesús va a mostrar a sus más íntimos amigos un anticipo de esta gloria con la que volverá al final de los tiempos.

Este momento será para los suyos una confirmación más de la fe antes de los acontecimientos de su Pasión y muerte. De igual manera Cristo al regalarnos las circunstancias favorables, nos alienta a permanecer fieles ante las dificultades de la vida.

La felicidad que da la experiencia de Cristo no puede compararse a la felicidad pasajera. Tanta es la fuerza sentida por los discípulos que hace exclamar al mismo Pedro “que bien se está aquí” y, olvidándose de sí mismo, se ofrecerá para albergar a Moisés, Elías y a Jesús edificando tres tiendas.

Si bien los discípulos no comprendieron en el momento el significado de la transfiguración, después lo iban a comprender mejor hasta tal punto de dar su vida por Él ¿Tú qué vas a hacer por él hoy?