Mt 7,7-12
Mt 7,7-12
Lo mínimo que se nos puede exigir es, como nos lo dice hoy Jesús, tratar a los demás como nosotros quisiéramos que ellos nos trataran. Es sin embargo triste que muchas veces ni siquiera hayamos llegado a este nivel de caridad y respeto para los hermanos, para la gente que nos rodea.
Nos encontramos con frecuencia con faltas de respeto, con injusticias, incluso con agresiones que nosotros no seríamos capaces de tolerar en nuestras personas.
La cuaresma nos invita a reflexionar en nuestra vida diaria, en el trato y relación que tenemos con los que convivimos, para descubrir nuestras imperfecciones, sobre todo en la caridad, a fin de modificar nuestro comportamiento y de esta manera poder llegar a ser buenos, misericordiosos y compasivos como nuestro Padre celestial que está en el Cielo.
Hazte consciente por este día de tu trato con los demás, y busca en todo tratarlos con generosidad, amor, cortesía, como seguramente te gustaría que ellos lo hicieran contigo y si puedes dales un poquito más pues en esto te reconocerá como verdadero Cristiano.